Río atmosférico extremo traerá hasta 150 mm de lluvia a Magallanes, Aysén y Los Lagos

Río atmosférico extremo traerá hasta 150 mm de lluvia a Magallanes, Aysén y Los Lagos

Lluvias intensas encabezadas por un río atmosférico golpean el sur de Chile

Cuando parece que el verano se despide en el sur de Chile, un fenómeno meteorológico de gran escala irrumpe: un río atmosférico categoría 4 a 5 traerá lluvias fuera de lo habitual desde el martes 18 de febrero de 2025. Las regiones de Magallanes, Aysén y Los Lagos sentirán el peso de este evento con acumulados de entre 100 y 150 mm en menos de una semana, según informa Meteored. Detrás de la noticia está la combinación de una alta presión que cede frente al avance de un sistema de baja presión en el Pasaje de Drake, el pasillo por donde el clima austral muestra su lado más extremo.

Este tipo de ‘ríos’ son masas de aire cargadas de humedad que cruzan el Pacífico y, al llegar a Chile, provocan lluvias extensas en poco tiempo. El primer impacto se dará en la mitad sur de Magallanes: ciudades como Puerto Natales, Punta Arenas y Porvenir verán caer las primeras gotas, pero el sistema no planea detenerse ahí. Hacia mediados y finales de esa semana, el frente de mal tiempo irá escalando hacia el norte, alcanzando el sur de Aysén y luego Los Lagos, extendiendo las lluvias a zonas como Coyhaique, Chaitén y hasta Osorno.

Riesgo de inundaciones y el papel del ciclón extratropical

Riesgo de inundaciones y el papel del ciclón extratropical

El pronóstico señala algo que genera inquietud en la población: no se trata de lluvias aisladas típicas del sur, sino de precipitaciones continuas asociadas a una masiva inyección de humedad tropical. Además, coincidirá un ciclón extratropical de grandes dimensiones, fenómeno capaz de mantener la intensidad lluviosa cuando otros sistemas suelen debilitarse. Este ciclón reforzará las precipitaciones incluso durante el último fin de semana de febrero, facilitando que el agua acumulada sature rápidamente el terreno y cause crecidas repentinas.

La situación es preocupante por las potenciales consecuencias:

  • Inundaciones urbanas y rurales por acumulación de agua.
  • Desbordes de ríos en cuencas vulnerables de la Patagonia y el sur de Los Lagos.
  • Interrupciones en rutas y caminos secundarios, especialmente en zonas donde los sistemas de drenaje son precarios.
  • Mayores riesgos para comunidades aisladas y para el tránsito de camiones y turistas rumbo a la Carretera Austral.

Durante el verano, las regiones afectadas suelen tener una ventana de relativa estabilidad, lo que permitió actividades al aire libre y trabajo en el campo. Sin embargo, la irrupción de este río atmosférico podría cambiar de golpe la rutina, poniendo a prueba la respuesta de servicios de emergencia y de la población local, que ya está habituada a los vaivenes del clima pero no a una secuencia tan persistente de lluvias torrenciales.

Meteorólogos insisten en la vigilancia constante, ya que la persistencia de sistemas de baja presión y la abundante humedad procedente de zonas tropicales hacen difícil predecir con exactitud cuándo y dónde serán los mayores acumulados de agua. El consejo para las próximas semanas en Magallanes, Aysén y Los Lagos: precaución y prepararse para días que mezclarán paisajes verdes con calles convertidas, temporalmente, en auténticos ríos.