La noche que Dominik Mysterio revolucionó WrestleMania
Lo que parecía otra edición más del siempre impredecible WrestleMania terminó siendo una noche histórica para los fanáticos de la WWE. Dominik Mysterio dejó atrás su papel secundario y se apropió de los focos al conquistar el Campeonato Intercontinental en un frenético combate Fatal 4-Way. Salió en escena junto a Finn Bálor —su compañero dentro de The Judgment Day— y enfrentando a rivales como Bron Breakker y Penta, nadie podía prever la traición que definiría la lucha.
La batalla tuvo todo lo que convierte a WrestleMania en el evento más grande de la lucha libre: alianzas temporales, traiciones inesperadas y una trama digna de película. Al principio, Dominik y Bálor intentaron cooperar, pero las tensiones se desbordaron cuando Mysterio buscó conectar su famoso 619. Bálor, con la experiencia a flor de piel, lo supo frenar. El caos explotó en ese punto y la intervención de Carlito añadió gasolina al fuego: trató de apoyar a Mysterio y Bálor, pero Breakker lo sacó del escenario de manera espectacular, atravesando la mesa de comentaristas con una lanza brutal.
Un evento familiar y un club exclusivo
Lo que nadie esperaba era el giro final. Justo cuando Bálor tenía la victoria prácticamente asegurada, Dominik lo sorprendió con un implacable Frog Splash y llevó a cuenta de tres para levantar el cinturón. El gesto no solo significó una traición a su compañero: representó la culminación de meses de tensiones en The Judgment Day y trazó una nueva ruta para el personaje de Dominik dentro de la facción.
Esta victoria lo pone en una posición única en la historia de la WWE. Dominik entra en el selecto grupo que comparte con su padre, Rey Mysterio, que también obtuvo el título intercontinental en WrestleMania 25. Solo otras familias han logrado esa hazaña: Curtis Axel seguido de Mr. Perfect, y Jey Uso después de Rikishi. La rivalidad familiar en la lucha libre cobra así una dimensión legendaria.
La derrota de Breakker no pasó desapercibida, ya que venía de ejercer una segunda etapa dominante como campeón y de superar a múltiples aspirantes en semanas recientes. Sin embargo, la astucia táctica y la ambición de Dominik terminaron siendo más decisivos que la fuerza bruta. El giro con Bálor abre incógnitas en The Judgment Day y deja a los fanáticos especulando sobre el futuro de la facción y del propio Mysterio como campeón intercontinental. No es descabellado pensar que este momento represente un antes y un después en los próximos meses de la WWE.